lunes, 1 de mayo de 2017

LOS ESCONDITES

Jesús Yagüe, director de “Los Escondites” es uno de esos directores que se encuentra a sus anchas allá dónde tenga que rodar, y con el género que le toque. Así desarrolla su carrera entre el cine y la televisión, y toca todos los palos, desde el “Landismo”, hasta el horror rural y atmosférico. De hecho, su película “Cara al sol que más calienta”, como podrán intuir por su título, le costó no pocos quebraderos de cabeza allá a finales de los setenta y tuvo que lidiar con una censura, que al final estrenó su película con el título de “Casa de citas”. Así, de su carrera, sus títulos más populares serían “Más fina que las gallinas” y “Préstame a tu mujer”, adscritas ambas a nuestra comedia más populista. Asimismo, debutaría en la gran pantalla con una película para el lucimiento del grupo musical de los 60 “Miky y los Tonys”, cuyo título pronunciado, es como morder una tarta rellena de sirope de fresas ¡ “Megatón Yeyé”!
Sin embargo,  los coleccionistas de rarezas, siempre destacaban una vieja película de terror de Yagüe datada en 1969, ignotísima, de aquellas que estando perdidas durante años no hay forma de localizar, hasta que la divina providencia pone la única copia disponible de la cinta en tu camino. Y yo he tenido la suerte de ser uno de los pocos que han podido ver esta película, amén de los espectadores que la cinta tuvo en la sección “Brigadoon” del festival de Sitges del pasado año; “Los Escondites”.
En ella, un niño huérfano que se traslada a vivir a casa de sus abuelos,  se despide de sus padres en el mausoleo donde están encerrados, y lo hace de una forma muy extraña: Succiona las tumbas, como queriendo absorber sus espíritus. Una vez en casa de sus abuelos, encontrará a su tía, una extraña mujer que vive allí enclaustrada desde que enviudó. De manera que en la casa, se sucederán las apariciones y los hechos inexplicables en los que de manera indirecta tiene que ver algo la tía del niño, si bien, todo parece indicar que los hechos extraños son motivados por otras cuestiones ajenas a su tía.
Se trata de una cinta de terror psicológico absolutamente inquietante y bien ambientada, rodada con una cadencia lánguida que por momentos parece dejar la película en un punto muerto, y que así permanece incluso en el momento en el que las intrigas parecen esclarecerse.
Ante todo, “Los Escondites” es una historia de fantasmas como tantas otras que hemos visto mil veces, pero con la diferencia de que esta estuvo, si no primero, sí antes que las que después se hicieron populares. Me refiero a la influencias de “Los Otros” de Amenabar, por ejemplo; todo apunta a que esa cinta bebía de “Otra Vuelta de Tuerca” de Eloy de la Iglesia, e incluso de algún clásico Americano; pero como fuere, De la Iglesia debió fijarse en “Los Escondites” para hacer la suya, y algo de esto quedó en “Los Otros”. Como fuere, en genuinidad, esta película les gana. Tampoco quiero decir que sean películas inspiradas en esta, pero vaya, si que  recuerdan ligeramente.
Por otro lado, la peli es confusa, por momentos aburrida y absurda otros tantos, pero solo por el ambiente enrarecido en el que te envuelve la película, y esa sensación de inquietud, ya está muy por encima de las otras. Algunos de sus travelings interminables, o esas lentes que deforman ligeramente la imagen, verdaderamente justifican el visionado. Y esque “Los Escondites” es una película muy seria que se toma muy en serio a sí misma; y eso es lo mejor que ofrece.
Con paciencia, la película les atrapará, y comprenderán por que es tan especial.  Ahora, vista así, sin más, y con el móvil en la mano, pues entonces resultará un coñazo. Denle una oportunidad… si la localizan.
No se pierdan en el reparto a una jovencísima y guapísima Terele Pávez.